El jurado de la Corte Federal de El Paso, Texas, en un acto de cinismo, absolvió este viernes de todos los cargos a Luis Posada Carriles, quien a pesar de ser un terrorista confeso no enfrentó cargos por terrorismo sino por mentir a las autoridades de inmigración.
El indignante veredicto de inocente en el caso Posada, además de poner a un asesino a transitar libremente por las calles de Estados Unidos, demuestra la culpabilidad de la CIA y el gobierno norteamericano en actos terroristas contra Cuba, con el objetivo de destruir el proceso revolucionario. Como el mismo Posada declarara en El Miami Herald del 10 de noviembre de 1991: "El sabotaje (crimen de Barbados) fue el golpe más efectivo que se haya realizado contra Castro".
Como si fuera poco, Carriles expresó al The new York Times, el 12 de julio de 1998, "La CIA nos lo enseñó todo, cómo usar explosivos, CÓMO MATAR, hacer bombas...nos entrenaron en actos de sabotaje".
Por su parte, Guillermo Novo Sampol, cómplice de Posada Carriles, en una entrevista concedida por error a la publicación soviética Literatura Gaceta, en Miami, el 29 de diciembre de 1976, declaró: "cuando mueren pilotos cubanos, diplomáticos o miembros de sus familias a mi no me causa pena, la muerte de estas personas siempre me alegra".
Por su parte, Guillermo Novo Sampol, cómplice de Posada Carriles, en una entrevista concedida por error a la publicación soviética Literatura Gaceta, en Miami, el 29 de diciembre de 1976, declaró: "cuando mueren pilotos cubanos, diplomáticos o miembros de sus familias a mi no me causa pena, la muerte de estas personas siempre me alegra".
Exactamente el 6 de octubre de 1976 llegó al areopuerto internacional Seawell de Barbados, un DC-8 de la aerolínea Cubana de aviación que efectuaba el vuelo CU- 455. Eran las 11:21 a.m. Cincuenta y cuatro minutos después despegó con destino a Jamaica. A las 12:23 una explosión conmovió la nave, la cual se incendió y después de 15 dramáticos minutos cayó al mar.
Era evidente que el terrorismo de la CIA y sus asesinos políticos (Posada Carriles y cómplices) a sueldo había matado a 73 personas que viajaban en ese vuelo, pero no logró aterrorizar a los cubanos sino fortalecer aún más la revolución y la unidad de su pueblo. Ante el crimen de Barbados los vivos juraron Patria o Muerte!
Familiares de las víctimas y más de un millón de personas lloraron y rindieron homenaje póstumo a las víctimas del crimen de Barbados.
Cuba no olvida, no perdona tales actos de terrorismo contra sus hijos.
Cuba no olvida, no perdona tales actos de terrorismo contra sus hijos.
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